La Moringa, la carne de res y la Claria.

El otro día en un debate puramente dialectico me hablaban (con la intención de convencerme) de que la siembra de la moringa beneficiaria casi de forma maravillosa los problemas de pasto (alimento) al ganado mayor, de esta forma podría aumentar considerablemente la cantidad de ganado vacuno en nuestro país y por supuesto J más carne,  cosa que enseguida refuté porque como siempre, veo que se trata de buscar la variante a virtud de “poción mágica” a los problemas que enfrentamos en Cuba. Soy una persona difícil de convencer, pero sobre todo escéptica, condición que ostento después de haber visto (en mis solo 28 años) tantos intentos fallidos de las recetas importadas de otros lugares que fueron efectivas allí, en su lugar de origen, pero no aquí.

De este tema siempre va a existir mucha tela por donde cortar, quisiera zanjar por lo sano sin extenderme ni comentar ejemplos vivos,  exponiendo mi criterio que siempre será enfocado a que nuestra única solución es el trabajo, el sudor, la eliminación del marabú y el aumento (ya necesario, ahora más que nunca) de los salarios, o como yo lo llamaría por mi propia condición de trabajador estatal, el pago de un salario decoroso.

La nueva corriente promueve que la moringa combinada con un pequeño conteo de dos  plantas más es la receta ideal para que el ganado vacuno prospere en nuestro país, porque en otros lugares ha dado resultado efectivo, incluso muchos de nuestros científicos han dejado constancia basados en investigaciones  internacionales y de ellos mismos,  que efectivamente la moringa es consistente.

 Pero como la vida no es una probeta, ni un pequeño laboratorio donde generalmente después de esfuerzo se obtienen resultados satisfactorios, descubrí en uno de esos periódicos viejos, que llegó a mis manos como un refuerzo para la preservación de la congelación de un pomo de mermelada procedente de Guantánamo para mis hijos (que son adictos al jugo de mango), este articulo que enseguida busque en la web y fue el que promovió a que escribiera estas letras, criticas pero sinceras y Dios me permita que objetivas también.

El artículo es este: http://www.granma.co.cu/2012/06/22/nacional/artic03.html  y se titula: El búfalo en su laberinto.

Después de leerlo, amén de que su tema central es exaltar a tan abnegados trabajadores que literalmente cazan a los búfalos en Pinar del Río, simplemente pensé ¡HELLO! (entiéndase por el uso común de la exclamación en Venezuela, como que no se hace entender o no entiende, no el saludo común en idioma Ingles).Es decir que en Cuba si hay carne de Res (más bien de búfalo), ¿cuando fueron importados estos animales a Cuba?  EL artículo me expone que en 1987 (yo tenía 3 años de nacido) fueron liberados enPunta de palma. Es decir, que hace 25 años que estos animales conviven con los cubanos y somos unos cuantos que recién nos enteramos del asunto. No pretendo mencionar los avatares del artículo, simplemente el que tenga paciencia(c como yo) que lo lea, solo quiero presentar mi punto de vista en este asunto.

Primero me parece bien acertada esa importación de búfalos sobre todo en los años 80, lo que me parece absurdo incluso ridículo es que hayan sido desatendidos  a la de Dios, sin control ninguno por casi 25 años. El otro tema triste es que pese a la extensa caza que se está realizando (llamémoslo controlarlos) aproximadamente el 18% no es comestible simplemente porque han vivido silvestres y sin control.

Se han tenido que pagar aproximadamente 130 mil pesos por concepto de indemnización por perdidas al sector particular provocadas por estos animalitos sueltos, este descontrol y su sucesiva invasión de tierras donde no se esperaba su invasión se debe a las 6 338 hectáreas que tenemos cubiertas de marabú.

Bien, este era el punto al que quería llegar. La moringa no va a solucionar milagrosamente nada, es la eliminación de ese marabú que dejamos crecer en nuestras tierras después de tantos años ociosas y a la deriva. En Cuba siempre ha existido la ganadería y jamás hubo la necesidad imperiosa de traer moringa ni ninguna otra planta foránea para solucionar el problema de los pastos, el detalle estaba en que había siembra, trabajo de limpieza, cosa que actualmente todavía no llega con pegada fuerte. El problema de la ganadería y su fuente de alimento será solucionado cuando se elimine el marabú y se cultive pasto, de ese que vio Cristóbal Colón cuando llego a Cuba y quedo maravillado por el verdor característico de nuestras tierras.

Con el tema de los búfalos queda una enseñanza enorme, nada resuelve el estado invirtiendo en esos ejemplares, seguramente obtenidos a altos precios más la transportación si después de importados , las personas encargadas  de controlarlos se despreocupan y ocurre lo que aquí, quedan a merced de su propia fuerza y se convierten en búfalos cimarrones, las pérdidas son enormes y los afectados somos nosotros mismos , hasta mi hijo y mi hija , que tan adictos son a su picadillito de res que muy discretamente les llega a la carnicería una vez al mes hasta que cumplan 12 años.

No es la primera vez que ocurre esto, el pez gato es otro ejemplo de esos hermosos proyectos que se implantan sin mucho control a expensas de los enormes gastos que implica para el estado y después no tienen control sobre las especies, todos sabemos el enorme daño que está ocasionando en determinados lugares de nuestro país la presencia no controlada de este extraño (AUNQUE SABROSO PEZ).

A buen entendedor, deben sobrar las palabras, conquistaremos nuestro futuro con sudor, con sacrificio, con esfuerzo, con trabajo.  Ya no estamos en tiempos de desmochar monte (Como hicieron los colonizadores españoles), es  tiempo de desmochar marabú, de sembrar, y sí, la moringa tiene un espacio en nuestras tierras, junto a las otras que siempre han estado allí, pero antes de compartir nuestro suelo autóctono debe eliminarse el marabú, sino la tarea, ténganlo casi por seguro, va a ser en vano.

#carne-de-res, #claria, #cuba, #moringa